Yudith Damas Gutiérrez

Dear Profe:

Recuerdo cuando llegué a la Isla, era de noche con gente desconocida; al día siguiente bien temprano en la mañana adentramos al Instituto y de pronto se acerca un caballero jovial, alegre, espontáneo, risueño, ágil y sumamente agradable!!! Invitandonos a pasar, logrando hacernos sentir que estábamos en casa.

Cuando conocí de su persona sabía que era una de los nuestros, una persona que a pesar de llevar una corteza senil, llevaba consigo un corazón joven, enorme, enorme para compartir, y una mente impresionantemente extensa, brillante, con mucho que dar, y mucho que recibir, por que contaba en demasía la humanidad que llevaba su expresión, por ende, todos dábamos sin él esperar algo si quiera.

Arencibia, lo recuerdo chacoteando con todo el grupo, brindando con los vasos llenos de Ron, antojando una deliciosa bienvenida con bocadillos, cremas de licor, y tirando las fotografías a todo lo que daban esas cámaras!!!

A pesar de que solo fueron 15 días de estrecha relación, la importancia de las palabras y argumentos conjugados es inolvidable, el semblante y la dedicación que emana una persona es difícil de olvidar!!! Los gratos recuerdos jamás se pierden, se llevan en la mente registrando el espacio y tiempo vivido. Personas como Felix, se quedan con nosotros!!! Cubano tenías que ser!! Humildad+Solidaridad+Inteligencia= Ser Humano.

HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!!!!

Yudith Damas Gutiérrez Tabasco, México.